Aprendizaje para ir al baño

Comencemos a enseñarle al niño a ir al baño

¡Felicitaciones! Tu pequeña sabe que tiene que ir al baño, sus pañales se mantienen secos y está mostrando otras indicaciones clásicas de estar lista para aprender a ir al baño. Lo más probable es que esté bien comenzar.

¿Y ahora qué? Bueno, antes de comenzar oficialmente el entrenamiento para ir al baño, asegúrate de estar lista tú también para asumir el desafío. Esto requiere un compromiso, porque probablemente necesitará unas seis semanas para completar el entrenamiento básico.

Aquí te damos algunos consejos que te ayudarán cuando decidas comenzar.

Elige una bacinica

Puede parecer obvio, pero es muy importante tener un poco de planificación antes de comprar. Hacer que tu pequeño participe en la compra de su bacinica puede ayudar a generar entusiasmo y fomentar su interés en el entrenamiento para dejar de usar pañales. Deja tiempo para ir de compras juntos y déjale ayudarte a seleccionar la bacinica perfecta.

Jugar con la bacinilla

Así es, debes jugar con la bacinilla. Ayudará a tu hija a sentirse cómoda y orgullosa de tener un baño propio. Déjala llevarla donde quiera (en realidad, no es necesario que esté en el baño) y anímala a sentarse con la ropa puesta para comenzar. Puedes agregar más diversión a la experiencia haciendo que juegue a entrenar a su muñeca o peluche favorito para que aprenda a dejar los pañales.

Elógiala

Aprender a ir al baño como los niños grandes no es fácil. Tu pequeña necesita tu apoyo y ánimo para seguir mejorando. Elógiala por su interés en sentarse en la bacinilla, incluso si no hace popó, pipí ni se quita el pañal. Cuando tenga un accidente (sucede), debes ser positiva y hacerle saber que está bien y que puede volver a intentarlo la próxima vez.

Prueba un incentivo

¿Cuál es el mejor incentivo? Eso depende de cada niño. Tal vez sea suficiente con regalarle una calcomanía reservada para el entrenamiento con su personaje de dibujos animados favorito. Si no es suficiente, ofrece tiempo de juego en el parque o un regalo adicional. Podrías tener que experimentar un poco para averiguar qué es lo que más atrae a tu pequeño, pero al final se sentirá feliz sabiendo que está progresando y se están reconociendo sus esfuerzos.

Evita el castigo

¿Hay un nuevo charco de pipí en la sala de estar? Respira hondo y evita castigar a tu hijo por accidentes inevitables. Ser negativo no lo ayudará a aprender más rápido y probablemente tendrá el efecto opuesto. Algunas investigaciones incluso sugieren que el uso de técnicas de castigo durante el entrenamiento para dejar el pañal podría significar un mayor riesgo de incontinencia e infecciones del tracto urinario para tu pequeño, algo que obviamente no es bueno.

Recompensa su éxito

¿Tu hija ha estado utilizando la bacinilla correctamente durante una semana o más? Si es así, probablemente está lista para usar calzoncitos de entrenamiento o ropa interior de algodón. Puedes dejar que ella elija sus estilos favoritos en la tienda como recompensa por todo su esfuerzo. Recuerda que definitivamente demorará varios meses o incluso años en dominar el control intestinal y la sequedad nocturna. Pero eso no le resta importancia a su logro. Aprender a usar la bacinilla con éxito es un hito digno de celebración.
Por Karen Grimaldos para Huggies.com

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